jueves, 28 de marzo de 2013

Semana Santa 2013.

Vivamos nuestra PASIÓN que ya vendrá la RESURRECIÓN ...


sábado, 9 de marzo de 2013

1 frase (5)


Lo sé, parece que hace millones de años que no tenemos entrada en mi blog, ahí va ésta para la sección 1 FRASE cuyo asunto es: TODO ES EMPEZAR ...

1 FRASE:

"Un comienzo no desaparece nunca, ni siquiera con un final."


- Harry Mulisch -


1 PELÍCULA:

"Sonrisas y lágrimas"






- Con Julie Andrews y Christopher Plummer  -

1 CANCIÓN:




- Rosana -

1 LIBRO:

"Historia de dos ciudades"



Charles Dickens-

1 TEXTO:

"El problema"

Un   y un guardián compartían la administración de un monasterio zen. Cierto día el guardián murió, y había que sustituirlo. El gran maestro reunió a todos sus discípulos para escoger a quien tendría ese honor. “Voy a presentarles un problema —dijo—. Aquel que lo resuelva primero será el nuevo guardián del templo”. 

Trajo al centro de la sala un banco, puso sobre éste un enorme y hermoso florero de porcelana con una hermosa rosa roja y señaló: “Éste es el problema”. 

Los discípulos contemplaban perplejos lo que veían: los diseños sofisticados y raros de la porcelana, la frescura y elegancia de la flor... ¿Qué representaba aquéllo? ¿Qué hacer? ¿Cuál era el enigma? Todos estaban paralizados. Después de algunos minutos, un alumno se levantó, miró al maestro y a los demás discípulos, caminó hacia el florero con determinación y lo tiró al suelo. 

“Usted es el nuevo guardián —le dijo el gran maestro, y explicó—: Yo fui muy claro, les dije que estaban delante de un problema. No importa qué tan bellos y fascinantes sean, los problemas tienen que ser resueltos. Puede tratarse de un florero de porcelana muy raro, un bello amor que ya no tiene sentido, un camino que debemos abandonar pero que insistimos en recorrer porque nos trae comodidades. 

Sólo existe una forma de lidiar con los problemas: atacarlos de frente. En esos momentos no podemos tener piedad, ni dejarnos tentar por el lado fascinante que cualquier conflicto llevan consigo”. 

Los problemas tienen un raro efecto sobre la mayoría de nosotros: nos gusta contemplarlos, analizarlos, darles vuelta, comentarlos... Sucede con frecuencia que comparamos nuestros problemas con los de los demás y decimos: “Su problema no es nada... ¡espere a que le cuente el mío!” Se ha dado en llamar “parálisis por análisis” a este proceso de contemplación e inacción. ¡Busca la solución!