domingo, 13 de septiembre de 2009

Aún ...

1 abril 2009
...en las limitaciones selváticas (no es que no pueda hacer cosas que para nosotros en Europa cotidianas, sino que, sencillamente, es diferente la ciudad que me rodea y hay que llevarlas a cabo dentro de unos horarios y lugares determinados ...), os envío este vídeo ...no me he podido resistir.

Abrazos a tod@s ...realmente me ha emocionado ...no tengo palabras
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Corpus

De vuelta de Loja

Ya he llegado a la selva.
Han sido unos días estupendos en los que he conocido una ciudad más del Ecuador: LOJA.
Es una ciudad cultural donde se cultiva la música, puedes salir a pasear tranquilamente, tiene lugares sorprendentes, unas vistas estupendas, el clima es agradable, limpia ...y nuestra universidad en Loja, la UTPL (www.utpl.edu.ec) proyectando sueños.
Tenemos:
  • Fábrica de cerámica
  • Laboratorios
  • Germoplasma (¡cuánto me acordé de tí, MariMerch)
  • Fábrica de lácteos
  • Laboratorio de inglés con su té y todo
  • Campus alucinante, inmenso
  • Dos hoteles (La Casa Lojana y el Howard Johnson)
  • Y mil cosas más que veréis en la web
En fin, todo un contraste, ...aquí donde vivo una ciudad todavía por hacer, no se puede ir a tomar café porque no hay cafeterías, hay zonas descuidadas, ...bueno, ya os lo he comentado en mis anteriores emails.
Y Loja, una ciudad donde gente humilde y señorío se dan de la mano, ...es decir, diversos mundos en un mismo país.
Pero ...¿sabéis qué? ...que doy GRACIAS por las limitaciones que vivo porque, en verdad, me invitan si cabe, aún más a proyectar mis sueños y a soñarlos y a darme cuenta hacia donde queda enfocada mi vida, así de sencillo ...no hay más comlicación
Aquí es donde yo trabajo www.pucesd.edu.ec
Hoy, os dejo porque quería compartir con tod@s, con este poema "La rosa clandestina" de mi amigo Carlos Gargallo que dice así:
Yo era como un pez en una pecera sin agua,
tenía la sensación de que tan poco había oxigeno,

y parecía de noche cerrada,
solo era mediodía.

Nadie aparecía por la calle,
los locales estaban cerrados a cal y canto;
ni un coche, ni un guardia,
ni siquiera una paloma,
o algún niño descarriado.
La ciudad me ocultaba algo, no sé,
un misterio a través de las ventanas,
detrás de las puertas donde,ya solo,
podrían vivir los gatos.
Entonces
como un tren que se acerca
fue llegando un murmullo
de voces y lamentos,
alguien dijo, que joven era
para ese traje de pino.

Una flor quedó en el suelo
tras el paso del cortejo,
una rosa clandestina
hecha de amor y versos.

Loja